12 Mar Definición de Tectogénesis

Si bien el desarrollo de las montañas posee una causa orogénica, la tectogénesis estudia la forma en que estas fuerzas han actuado para dar lugar a las montañas. Los procesos que modifican la corteza terrestre son de tipo orogénico, epirogénico y magmático. Normalmente las cordilleras montañosas surgen en las zonas de subducción, márgenes en los cuales el material de una placa penetra por debajo de la otra, como mecanismo compensador de la generación de nueva litosfera en las proximidades de las dorsales oceánicas. Pero de hecho, estas fuerzas pueden manifestarse de forma diversa y dar lugar al desarrollo de cordilleras con características específicas, por lo que pueden distinguirse varios tipos:
Cuando se desarrolla una fosa que posee una zona de subducción cerca de un margen continental, se habla del tipo andino. Al romperse la corteza oceánica cerca del borde continental y hundirse bajo la masa del continente, tiene lugar una escamación de dicha corteza. Si la placa alcanza una profundidad apreciable, aproximadamente de unos cien kilómetros, se producen erupciones marinas y aparece un núcleo orogénico que contiene tanto magmas de carácter basáltico como granodioríticos. Este núcleo va ascendiendo de forma constante, da lugar al metamorfismo de rocas sedimentarias y alcanza el nivel del mar, lo que supone que el proceso de sedimentación presenta dos direcciones en su aporte. También adquiere una doble vertiente el plegamiento, por un lado hacia el océano, y por otro hacia el continente; de esta manera la cordillera presenta una aparente simetría.

Cuando la corteza oceánica se fragmenta, se produce un área de subducción lejos del margen continental y surgen una serie de islas. Si la placa que se ha hundido contiene una masa continental, deja una cuenca marítima que. es progresivamente rellenada por sedimentos que proceden tanto del desaparecido continente como de las islas. Mientras que en la zona de las islas tiene lugar un proceso de metamorfismo a elevada temperatura, en el área de subducción se originan rocas metamórficas. Cuando la masa continental se hunde alcanzando a la fosa, este proceso se interrumpe. Resultado de dicho choque es la formación de escamas, así como también de cabalgamientos en dirección al continente.

Cuando próxima a un continente existe una zona de subducción que determina el hundimiento de la corteza oceánica, puede ocurrir que arrastre a su vez a la corteza continental, con lo que se producirá un choque entre estas dos masas continentales. Dicha colisión da lugar tanto a grandes corrimientos como a escamaciones, pero, debido a la flotabilidad de estas dos placas, tal proceso queda bloqueado.