La mayor parte de las nieblas matinales se despejan de arriba abajo. Si la niebla es muy blanca significa que no hay una capa de nubes encima y el sol producirá suficiente radiación para despejarla. Lo que ocurre es que. aunque no pueda verse el sol, su calor penetra en la niebla. calienta el suelo y forma corrientes de convección que mezclan el aire húmedo de la superficie con aire más seco. Así también aumenta la velocidad del viento.
Si un frente cálido u oclusión se aproxima. suele traer aire más seco que despejará la niebla. Mientras la niebla desaparece. habrá algunas nubes cumuliformes que también desaparecerán y dejarán un cielo claro. La niebla puede tardar más en deshacerse en las hondonadas.
Si la niebla es oscura. indica o bien que es muy espesa o que hay una capa de nubes encima. En ambos casos, puede tardar toda la mañana en despejarse o puede no hacerlo.
Las nieblas espesas a menudo las despeja el viento, o pueden no desaparecer hasta que cambien la comente de aire húmedo. O el viento cambia de dirección y procede de una zona más seca. o el aire mismo se seca con el tiempo. A veces, suceden ambas cosas.
Aunque haya nieblas en el valle, con frecuencia el sol ilumina las cimas de las lomas.
Desde lo alto se disfruta de unas vistas privilegiadas, los campanarios y las torres eléctricas sobresalen por encima de la niebla que cubre el valle. Los vientos que suben por las colinas (vientos anabáticos) soplan en estas circunstancias y contribuyen a despejar la niebla del valle.
Las nieblas marítimas pueden durar días cuando el aire sigue llegando cálido y húmedo pero se despejan cuando cambia de dirección. Las nieblas marítimas que llegan a la costa por la noche pueden despejarse al llegar a tierra, pero no amanecerá un día de playa.